En invierno en Andalucía, sobre todo cuando vives en la sierra granadina, también el frío aprieta y… ¡bastante! Yo, por ejemplo, nunca pasé tanto frío en mi casa como el año pasado. Pues, las inclemencias del tiempo fueron muchas y variadas. Tuvimos, por ejemplo, unas nevadas impresionantes. A tal punto, que dicen los ancianos del pueblo no habían visto algo similar desde el año 1946. Con ello, al tener en casa unos míseros radiadores eléctricos que databan del año la nona, calentar el hogar de manera decente fue casi imposible y me pasé el invierno andando por casa con polares y bufanda. Entonces, decidí que este año ello no me volvería a ocurrir, y opté por contactar Eficiencia-V, una empresa de ingeniería e instaladora de sistemas de energías renovables andaluza.
Me la recomendaron varios amigos y conocidos que habían pasado por ella y que habían quedado muy satisfechos con el trabajo realizado y con los resultados obtenidos. Hay que subrayar que son líderes en instalaciones de energía solar fotovoltaica, energía solar térmica, aerotermia, calefacción de suelo radiante, biomasa y minieólica. Como podéis comprobarlo, todas ellas son soluciones integrales para el desarrollo de proyectos energéticos y ambientales. El respeto por el Medio Ambiente es para mí muy importante y fue uno de los puntos que más me llamó la atención y que acabó por convencerme totalmente. Decidí, pues, que los profesionales de dicha empresa serían los que se encargarían de cambiar mis viejos radiadores por un suelo radiante. A día de hoy, os puedo asegurar –al igual que mis amigos y conocidos– que he quedado contentísima con el resultado RADIANTE obtenido y que hasta ahora no he pasado nada de frío.
Beneficios del suelo radiante
¿Por qué elegí la opción del suelo radiante? Sencillamente porque los beneficios que se obtienen con este sistema de calefacción son muchos y excelentes. De hecho, os voy a enumerar algunos de ellos después de resumiros y explicaros en qué consiste la climatización por suelo radiante. Ante todo, hay que saber que un suelo radiante, o invisible, está constituido por una serie de circuitos de tuberías que se han previamente instalado en el suelo o techo de la casa (ello depende de las posibilidades y gustos del consumidor). A través de estos circuitos circula el agua a la temperatura deseada y necesaria para la calefacción de la casa. También me parece fundamental deciros que este tipo de sistema proporciona a la vez frío durante las épocas de calor. Así pues, el agua que se impulsa a temperatura templada, alrededor de los 40º C en invierno y de los 16º C en verano, permite crear un ambiente de lo más confortable y cómodo sin que haya movimiento de aire. Lo subrayo igualmente, porque estuve un tiempo barajando la opción de poner una bomba de calor y frío, alternativa que descarté después de que los expertos de la empresa me explicaran los beneficios que se obtenían al instalar una climatización por suelo radiante. En efecto, no sólo este sistema permite –como se ha dicho más arriba– que la temperatura de la casa sea, tanto en invierno como en verano, la idónea sino que el ahorro en consumo energético en comparación a los sistemas de calefacción tradicionales alcanza el 30 %.
Me parece un detalle importantísimo a la hora de elegir entre uno u otro sistema de climatización. ¿Verdad? Con ello, se trata de un sistema de lo más limpio y saludable puesto que no reseca el ambiente ni ocasiona desagradables y ruidosas corrientes de aire, a la vez que no genera ni polvo ni ácaros, como por ejemplo lo puede hacer la bomba de calor y frío, que por todas esas razones descarté. Por fin, ¡y no se trata de una de las menos interesantes!, instalar este tipo de climatización permite que la superficie útil sea más grande, puesto que no requiere en absoluto de ningún elemento que emita calor o frío. En mi opinión, se trata de una excelente inversión ya que su rendimiento a largo plazo se nota. Personalmente, lo digo y repito, estoy súper contenta de haber elegido a la empresa Eficiencia – V para la instalación de mi suelo radiante, porque hasta ahora no he pasado nada de frío, a pesar de las gélidas temperaturas e intemperies diversas que hemos sufrido este invierno en Granada.
Por otra parte, debo especificar a la vez (ya que este sistema de climatización lo instalé en mayo del 2016) que tampoco sufrí del calor el verano pasado, puesto que este sistema también proporciona frío cuando aprieta el calor. Y por nuestras tierras andaluzas… ¡aprieta bastante! Por ello, os lo recomiendo a gritos: ¡este sistema es de lo mejorcillo y saludable que se hace a día de hoy!